La inseguridad. La inflación. El cambio climático. A diario nos bombardean noticias que pueden hacernos sentir que Tucumán se viene a pique. Que aquí las cosas no mejoran y que las provincias vecinas, en cambio, sí han progresado. Lo cierto es que más allá de las percepciones subjetivas que cada uno pueda tener, estas afirmaciones se apoyan en datos: el Gran Tucumán tiene tasas de pobreza y de indigencia más elevadas que el resto de los distritos de la región y que gran parte de la Argentina. Un 20 % de nuestra sociedad metropolitana vive cerca de un basural.

Tenemos que mejorar.

Tenemos el deber y la urgencia de mejorar. Y es tanto lo que hay que levantar, que no vamos a poder hacerlo solos. Necesitamos una nueva generación de líderes que entienda y que trabaje junto con las empresas, con los gobiernos de todos los signos políticos y con las organizaciones de la sociedad civil.

Eso es lo que quiero. Quiero que mejoremos. Quiero que Tucumán sea una de las mejores cinco provincias de la Argentina. Aquí te cuento algunas de las cosas que logramos en Yerba Buena.